Diario de Augusta: Viernes, tiempo de despedida

Pasa casi todos los años. Ganadores del Masters que se despiden del torneo. Les gustaría hacer volver el tiempo atrás, pero lamentablemente el calendario no perdona. Esta vez les toco a dos que curiosamente ganaron en años consecutivos.

Larry Mize es el único ganador del Masters nacido en Augusta y es además el último en ganar el torneo sin bajar el 70 ninguna de las 4 rondas. En 1987 sumo 285 golpes y tuvo que ir a desempatar con Ballesteros y Norman. Un David frente a dos Goliath en donde solo Mize creía que podía tener chances frente a los dos mejores golfistas del mundo. Todo se decidió en el segundo capítulo del play off con el chip desde la derecha del 11, uno de los golpes más famosos en la historia del torneo.

“Si fuera por talento, Sandy debería ganar todos los torneos y yo debería salir segundo”, dijo Seve Ballesteros cuando le consultaron por la calidad del escoces. Uno de los grandes jugadores de finales de siglo pasado y uno de los menos valorados por el público. Lyle no solo gano el Masters haciendo birdie el hoyo 72 luego de un fabuloso hierro 7 desde los bunkers del fairway, sino que antes había ganado el Open y el Players.

Esta semana ambos le dicen adiós al Masters, y aunque seguramente seguirán viniendo cada segunda semana de abril a la cena de campeones, sus nombres no estarán más en el horario de salidas.

Además de esto hubo torneo y Koepka aprovecho la mejor parte del draw. Sin errores navego por Augusta National, firmo 67 y con -12 le lleva 3 a Rahm que todavía tenía 9 por jugar cuando sonó la sirena por segunda vez.

La nota del día la volvió a dar el ganador del US Amateur de 2022 Sam Bennet. El chico de 23 años repitió el 68 del primer día y tiene a todos impactados con su actuación. SI nos referimos a los resultados conseguidos por amateurs, solo Ken Venturi en 1956 supero su score para los primeros 36 hoyos. Solo imaginemos lo que sucedería si finalmente un amateur se calzara el saco verde en el lugar que creo el mejor amateur de la historia. Falta mucho todavía, pero ya lo hecho por Bennett es fabuloso.

La otra nota del día la dio Rory McIlroy. El irlandés se fue rápido de Augusta y sumo una nueva frustración en el Masters. Llego como uno de los favoritos, pero el viernes fue una sombra y nada le salió. Casi que hasta se lo vio frustrado al darse cuenta que otro año pasa y Augusta no le sonríe ni siquiera un poquito. No es solo el quien ha tenido problemas para completar el Grand Slam. Sam Snead y Mickelson no pudieron con el US Open; Tom Watson y Arnold Palmer nunca consiguieron el PGA Championship, Ray Floyd no pudo con el Open y Trevino jamás consiguió ganar el Masters. Así de exclusivo es ese club de ganadores del Grand Slam y que todavía tiene solo 5 miembros.

El dio termino antes con las dos suspensiones por tormenta y con un hecho que pudo haber terminado en tragedia. Minutos antes que sonara la sirena por segunda vez una muy fuerte ráfaga de viento soplo cerca del tee del 17. Uno de los altos pinos se cayó y en su camino arrastro a dos más chicos. Los tres cayeron en forma perpendicular al tee y por suerte no había ningún jugador caminando por allí y ningún espectador salió lastimado. Pudo ser una tragedia por que el pino de más de 40 metros de alto pudo haber causado un desastre.

Tiempo de despedidas en Augusta en este lluvioso viernes. Dos de ellas anunciadas. La otra, inesperada.