De un tiempo a esta parte sabemos que las entidades de golf más representativas del mundo convergieron en ordenar con mayor uniformidad la institucionalidad del hándicap nacional; ello a partir de enero del año 2020.

Los objetivos aducidos en su momento estuvieron vinculados a que los golfistas del mundo pudieran jugar en cualquier cancha en igualdad de condiciones, que además el nuevo sistema redundaría en un aumento de los torneos internacionales entre aficionados y obviamente en que la novedad tendería al crecimiento del golf. 

Los memoriosos todavía recordamos que en algunos países para tener hándicap era necesario cumplir con 22 golpes la ronda de golf. Más luego con el paso de los años esa cifra se elevó a 36 golpes y con este nuevo sistema se acepta que los potenciales jugadores de golf podrán tener un índex máximo de 54,0; ello para generar mayor divertimento.  

La pregunta que nos hacemos es si en estos dos años que llevamos el nuevo sistema realmente cumplió con los objetivos que perseguía. Todo el mundo sabe que la década previa a la pandemia provocó grandes bajas de jugadores en muchos países del mundo, siendo EEUU el de mayor declinación con una pérdida de varios millones de golfistas. 

El sistema nuevo entendemos pretendió cambiar la tendencia y aumentar el número de golfistas; lo que no sabemos es si tuvo más incidencia el nuevo hándicap o la pandemia resultó gravitante para que creciera el número de golfistas por su valor salud. 

Aumentar a 54,0 el índex se entiende como una medida para que más personas puedan jugar al golf; ello para contrarrestar una de las causas de la decadencia del golf en el pasado que es su complejidad. Ahora que ocurre con este tratamiento si el diagnóstico fue errado. Las personas dejaron y dejan de jugar al golf no solo por un tema de dificultad del juego, sino fundamentalmente por el factor tiempo y creemos que con esta medida no se lograrán mitigar los efectos negativos de esa circunstancia.

Los efectos positivos del crecimiento último del número de golfistas no tienen a priori que ver con decisiones dirigenciales; más bien por el cisne negro que significó la pandemia del COVID 19. 

Es importante saber diagnosticar con certeza las problemáticas de las cosas para poder asegurarnos de que el tratamiento tendrá los efectos que buscamos. Teniendo en cuenta que el factor tiempo puede haber sido el factor más importante de la baja de jugadores de golf y la pandemia nos hace esconder la causa más decisiva del estancamiento que ocurrirá en los próximos tiempos: ¿Volverá el golf a estancarse como antes de la pandemia? ¿El golf entretenimiento de los TOP GOLF se impondrá al golf tradicional ya que contempla ese factor y lo contrarresta? ¿El nuevo sistema de hándicap mundial fue una medida acertada para hacer crecer el golf? 

Les dejo estos interrogantes para que impulsemos este debate. 

Fuente: MiguelDonadio.com