En estas columnas editoriales dejamos de lado las noticias relacionadas con los torneos, los jugadores, los profesores, etc. que están a cargo de excelentes periodistas a lo largo y ancho del mundo y hacemos hincapié en todo aquello que interesa a la gestión de los clubes, de las empresas y de las organizaciones de nuestro deporte.
Aprovechamos para darle la bienvenida a la plataforma “GolfenEspañol.es” liderada por Francisco Aleman uno de los grandes comentaristas de golf del mundo que sin duda significará un gran aporte para impulsar el crecimiento de nuestro deporte y agradecer el espacio que nos han brindado para difundir nuestra especial visión sobre la gestión del golf.
La inteligencia de analizar nuestro deporte desde una visión más bien estratégica tiene su razón de ser en la humilde realización de aportes intelectuales que ayuden a los tomadores de decisiones en el impulso del crecimiento del golf.
Esta editorial apunta a poner en debate el perfil del siglo XXI de los decisores en el mundo de nuestro deporte.
En ese orden de ideas señalamos que el perfil de los tomadores de decisiones en todas las actividades ha tenido una enorme transformación y aquellos liderazgos que no han seguido la evolución que nos ha impuesto el vertiginoso siglo XXI han visto languidecer sus países, sus ciudades, sus empresas, sus organizaciones, etc.
Los “decision markers” en el mundo del golf tampoco pueden quedarse atrás y están obligados a seguir la misma evolución que en otras áreas de gestión se vienen dando y adoptar el concepto de lifelong learning como un salvavidas imprescindible si quieren sobrevivir como líderes de sus organizaciones. Caso contrario la tremenda marejada que trae la velocidad de los cambios de estos tiempos, en un mundo VUCA (volátil, incierto, complejo y ambiguo), los harán perder el timón del barco que estén piloteando.
Es fundamental que tengan una visión clara hacia donde quieren llevar a su club y/o a su empresa y/o a su organización del mundo del golf; y tener presente la frase del filósofo griego Séneca: “El que no sabe donde va, todos los vientos le soplan desfavorables”.
En ese sentido deben saber identificar las oportunidades de crecimiento que ofrece el mundo para nuestro deporte en todas las latitudes. Deben desarrollar planes de negocios comprendiendo en profundidad el mercado existente y mucho más el mercado a crearse pudiendo tomar para ello la gran herramienta de gestión denominada: “La estrategia del océano azul”, creado por dos profesores de la Universidad de Harvard: W.Chan Kim y Reneé Mauborgne.
Deben aprender a liderar equipos inclusivos qué desde la perspectiva de la multidisciplinariedad profesional, las diferentes edades y géneros de sus integrantes, la pluralidad de razas y de culturas, etc., son más proclives a generar mejores resultados de gestión que aquellos equipos de integración conservadora, estilo siglo XX y poco inclusivos.
Deben tener amplias capacidades comunicacionales para una amplia gama de audiencias y fundamentalmente tener gran habilidad para inspirar y motivar a toda su comunidad, tanto la cercana como la más alejada. Tienen que tener una mirada holística y/o panóptica o como ustedes la quieran llamar. Algunos la denominan la mirada del “Big Picture”.
Deben, y esta cualidad es fundamental en estos tiempos, ser innovadores y creativos en todas las acciones que impulsen, tomando a la tecnología como un gran aliado estratégico para hacer crecer exponencialmente la calidad de todas sus áreas de gestión. Todo debe estar al servicio de generar nuevas formas de atraer el enorme mercado inconquistado de personas que hoy no son parte de nuestro deporte y obviamente mantener a los actuales aficionados.
Recordemos que sobre un total de 8.000 millones de habitantes que hay en todo el mundo sólo 70 millones juegan al golf.
Deben tener ética y responsabilidad en su accionar promoviendo el juego limpio, la integridad y la responsabilidad social de sus clubes, empresas y organizaciones del mundo del golf. Es fundamental mantener altos los estándares éticos.
Obviamente deben seguir aprendiendo las nuevas habilidades de gestión en todos sus aspectos, estudiando y analizando las nuevas buenas prácticas de gobierno que otros van impulsando con éxito y estar muy atentos con aquellas herramientas que aumenten la capacidad de análisis de los distintos escenarios existentes y de aquellos que se puedan crear prontamente.
En conclusión, para que existan mejores gestiones que impulsen el crecimiento del mundo del golf necesitamos líderes en los clubes, en las organizaciones y en las empresas de nuestro deporte que sean visionarios, inclusivos, comunicativos, de mentalidad abierta y aprendizaje continuo y fundamentalmente éticos y responsables socialmente.
Cualquier opinión para agregar valor al debate es bienvenida.
Y si les interesa que desarrolle algún tema en especial que haga a la gestión no tienen más que pedírmelo.