No importa cuál adjetivo usemos. Todos le quedan bien. Eterno es el que se me ocurrió para el encabezado de esta columna que no intentará hacer una descripción de Bernhard Langer, sino que solo pretende enumerar los récords que el alemán ha ido escribiendo a lo largo de su carrera y un par de historias que lo marcan de cuerpo entero. Acá van algunos de esos datos:
– Nació el 27 de agosto de 1957 en Anhausen, Alemania
– Profesional desde 1972 (15 años)
– 122 títulos como profesional
– 42 títulos en el European Tour (segundo detrás de Seve)
– 2 veces ganador del Masters (1985 y 1993)
– 46 títulos en PGA Tour Champions (Lo siguen Irwin 45 y Trevino 29)
– 12 Majors en PGA Tour Champions (Lo sigue Nicklaus con 8)
– 8 títulos en el European Senior Tour
– Fue el primer jugador en ocupar el escalón más alto del Ranking Mundial cuando fue creado en 1986
– Terminó al tope de la Orden de Mérito en el European Tour en 2 ocasiones (1981 y 1984)
– 1985 y 1993 European Golfer of the Year
– Charles Schwab Cup: 6 (el que sigue tiene 3)
– Jugador del Año en el Champions Tour: 9
– Lista de dinero en el Champions Tour: 11 (7 seguidas)
– Mejor promedio de score en el Champions Tour: 7
– 2002 World Golf Hall of Fame
– Uno de los 5 jugadores en haber ganado torneos en 6 continentes
– Jugó Ryder Cup: 10
– Ganador de la Ryder Cup: 5
– Capitán del equipo de Europa que ganó la Ryder Cup de 2004
– Con 65 años es el jugador de más edad en ganar en el Champions Tour
Dos historias para cerrar este homenaje a Bernhard Langer que decidimos hacer en Golf en Español.
La primera es de 1990 durante la semana del Scottish Open en Gleneagles. Un buen amigo estaba trabajando de caddie con un jugador argentino esa semana. En una de las primeras dos rondas a este jugador le tocó el último horario de salida y para cuando terminaran no iba a quedar nadie en el club. Yo tenía auto y le dije que lo buscaba para ir a comer esa noche. Cuando me fui de Gleneagles pasé por el putting green y Langer estaba allí practicando junto a otros tantos jugadores. Eran las 4 de la tarde. A eso de las 9 de la noche, todavía con mucha luz, volví al club a buscar a mi amigo y si, Bernhard Langer seguía en el putting green. La única diferencia es que a esa hora era el único qué quedaba.
La otra sucedió en el Olivos Golf Club durante la semana del Torneo de Maestros durante los años 90´. Era el día del Pro Am y una fuerte tormenta hizo que el día se suspendiera en algún momento y cancelado más tarde. Langer, ya dos veces ganador del Masters, se puso el traje de lluvia y salió a caminar la cancha bajo el paraguas para poder hacer todas las anotaciones que necesitaba para el torneo. Otra vez era el único en la cancha bajo un diluvio.
Un par de historias que definen a Langer. Apasionado por lo que hace. Dedicado como nadie. Siempre en la búsqueda de algo que lo haga mejor. A punto de cumplir 66 años y más de 50 persiguiendo la pelotita por todas partes del mundo, y todavía falta ver más. Eterno