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La Revancha de los Cortos

La Revancha de los Cortos

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Cada tanto suele suceder. En un deporte en donde los bombarderos se divierten en cada cancha que pisan, esta vez le tocó a uno de esos que siempre juega primero los segundos golpes.

No hay muchos de estos jugadores que se queden con los grandes torneos, y haciendo un repaso rápido me acuerdo cuando Corey Pavin se quedó con el US Open en Shinnecock Hills pegando una madera 4 memorable en el hoyo 72. “El golpe de su vida”, dijo Johnny Miller en su primer US Open como comentarista. Una de las víctimas de Pavin  ese año fue Greg Norman quien en ese mismo hoyo 72 tiró al green con el hierro 7. Ya eran tiempos en donde los pegadores largos empezaban a mandar, aunque no tanto como en los últimos años. Eran épocas pre ProV1 y todavía la habilidad para manejar la pelota se hacía valer. Corey Pavin fue una buena prueba de ello porque pocos como él eran capaces de ejecutar tanta variedad de golpes.

Sigo buscando en mi memoria y viajo hasta el Masters de 2007 cuando Zach Johnson ganó en Augusta sin tirar en dos en ningún par-5 durante las cuatro rondas. En un domingo gélido y con mucho viento, tanto era el frío que hizo que Stuart Appelby que jugaba en el grupo final fue al pro shop y se compró uno de los sweaters de cashmire para jugar esa ronda, Johnson jugaba algunos grupos delante de los líderes y sin hacer nada excepcional se quedó con el saco verde. En realidad, sí hizo algo excepcional porque 69 ese día era más que muy bueno. Fue el último año que el Masters se ganó sobre par, 289 fue el score final, y Johnson dejó en el segundo lugar  a Tiger, Goosen y Sabattini por 2 golpes.

Seguramente habrá más de estos casos en la historia reciente, pero estos dos sirven para ilustrar el motivo de esta columna. Brian Harman pertenece a esa raza de jugadores en extinción. Zurdo y de baja estatura, Harman se destacó de muy chico al ganar el US Junior reservado para menores de 18 años. Jugó la Walker Cup para Estados Unidos y se hizo profesional en 2009 para llegar al tour en 2012. En su carrera ha jugado 340 torneos con 3 victorias, 51 top-10 y más de 31 millones de dólares en premios. Es la clásica carrera de un muy buen jugador, al que le ha costado cerrar a pesar de haber sido siempre uno de los mejores jugadores de green del circuito.

Les hablaba de la revancha de los cortos porque Harman, al igual que lo eran Pavin y Johnson, fue siempre de los más cortos desde el tee. Hoy ocupa el puesto 144º en distancia con el driver y promedia apenas más de 293 yardas. Nada para las distancias de hoy, pero parece que suficiente para levantar la Claret Jug.

El sábado en Liverpool Harman salió con cinco de ventaja y luego de dos bogeys tempranos en su ronda un espectador le gritó “No tienes lo que hay que tener para ganar el Open”. Harman lo escuchó y se dijo a si mismo que eso era exactamente la motivación que necesitaba para ganar el campeonato. Ese grito lo despertó, según sus propias declaraciones, y lo hizo jurarse que iba a ganar el campeonato porque íntimamente sabía que podía hacerlo.

Alguien me dijo la semana después del Open que esta había sido uno de los más aburridos de los últimos años, y no coincido para nada. Esta persona hacía referencia a que no hubo emoción en los últimos 9 hoyos para saber quién iba a ganar y es cierto, pero cuando Tiger o Rory ganaban por 8 todos nos rompíamos las manos aplaudiendo y escribiendo grandes artículos sobre la grandeza de esos triunfos. Lo que hizo Harman el fin de semana en Hoylake es digno de admiración y merece el mismo reconocimiento que cualquier otro campeón del Open. Les puedo asegurar que la cancha el domingo estaba eterna para todos y mucho más para Harman, que hacer bajo par no era tarea sencilla bajo la lluvia, y que con la Claret Jug al alcance de la mano es muy fácil jugar mal. Harman el domingo volvió a arrancar sobre par, pero bastó que su putter viera las oportunidades de birdie para poner todo en su lugar y hacer que el Open tuviera un final “aburrido”.

Jon Rahm, Brooks Koepka y Wyndham Clark se quedaron con los primeros tres majors, y muchos esperábamos que McIlroy levantara el trofeo en el Open, pero el cuarteto estelar de 2023 se completó con uno inesperado. Los pegadores cortos todavía darán pelea en este golf en donde la distancia manda, lo harán cada vez en forma más esporádica, pero cada uno de sus triunfos nos harán recordar que la habilidad para manejar la pelota siempre será una cualidad en la que se puede confiar.

Brian Harman es el Champion Golfer of the Year. Pavin y Johnson sonríen por que ganó uno de los suyos.

 Brian Harman con 16 años se llevó US Junior Amateur de 2003

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Esta entrada tiene un comentario

  1. Néstor

    Totalmente de acuerdo con lo que dice de Harman, gran campeón!!!

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