Matsuyama, Kim, Lee, Hovland y Aberg estarán entre los contendientes en Augusta National
Por Jim McCabe
Si estás atento al calendario meteorológico, probablemente sonó una alarma dentro de tu cabeza el 21 de marzo. Alerta, es la llegada de la primavera en el hemisferio norte.
Y la primavera en términos de golf, significa una cosa: el Masters está a la vuelta de la esquina.
Ahora bien, si el Masters te evoca visiones de color verde, como la codiciada chaqueta que se le entrega al ganador, o esa interminable extensión de césped, o las impresionantes vistas de los enormes pinos de Georgia que parecen tocar el cielo, aquí hay otra sugerencia:
También puedes buscar los variados sabores que hay dentro del Masters. Y los jugadores internacionales le dan ese gusto diferente tan característico.
Fanáticos del golf, hay una lista de participantes del Masters que merecen su atención: Hideki Matsuyama de Japón y sus compatriotas Ryo Hisatsune; los coreanos Tom Kim, Sungjae Im, Si Woo Kim; y Min Woo Lee, nacido de padres coreanos pero criado principalmente en Australia. El chileno Joaquín Niemann y el regreso del argentino Emiliano Grillo, y no olvidemos a jugadores como el actual campeón de la FedExCup, Viktor Hovland de Noruega, y una de las estrellas en ascenso más importantes del juego, Ludvig Aberg de Suecia, quien hará su debut en el Masters.
Son todos jóvenes, Matsuyama, que aparentemente juega desde siempre, solo tiene 32 años, mientras que Hisatsune, de 21, es el más joven.
Para apreciar el gusto que este grupo de jugadores aporta al Masters es necesario estudiar la preciosa historia de este gran campeonato. El Masters, que debutó en 1934 y se basó en la visión del icónico aficionado Bobby Jones, siempre ha sido por invitación y su credo nunca ha flaqueado. Los organizadores querían a los mejores jugadores, sí, pero también querían ampliar su alcance para asegurarse de rendir homenaje a los jugadores de todos los rincones del mundo.
En 1934, se extendieron invitaciones a golfistas de Inglaterra y Canadá. Dos años más tarde, un par de golfistas de Japón, Torchy Toda y Chick Chin, fueron incluidos en el field. En 1940 incluyó a Jim Ferrier de Australia y a un par de golfistas de Argentina, Martín Pose y Enrique Bertolino.
A medida que el juego ha evolucionado y ha surgido un grupo más amplio de jugadores talentosos, llenar el field ha requerido que los oficiales del Masters dependan distintos estándares de clasificación (el OWGR, ganadores del PGA TOUR, mejores resultados en los majors). Pero para darles más crédito, los oficiales del torneo reconocen que hay momentos en que los jugadores no cumplen con algunos de los criterios y por eso se extienden invitaciones especiales.
“El Masters tiene una larga tradición de invitar a destacados jugadores internacionales que no están clasificados de otro modo”, dijo Fred Ridley, presidente del Augusta National y del Masters, el día en que se entregaron las invitaciones a Hisatsune, al chileno Joaquin Niemann y al danés Thorbjorn Olesen.
Es una parte de la tradición del Masters que es ampliamente respetada y sería difícil decir que los ejecutivos del club no predican con el ejemplo cuando se trata de su visión internacional. Consideremos que ellos están a cargo del Asia Pacific Amateur Championship y del Latin America Amateur Championship.
Los ganadores de estos torneos, obviamente, obtiene invitaciones de Masters.
El ganador de los dos primeros Asia-Pacific fue un joven de Japón, Hideki Matsuyama, que consiguió una histórica victoria en el Masters en 2021. El ganador en América Latina en 2018: Niemann, uno de los mejores jugadores del mundo, que recibió su invitación al Masters por su gran victoria en el Abierto de Australia.
Si uno presta atención a los pesos pesados que llegarán a Augusta en una semana, probablemente notará una tendencia. La mayoría son estadounidense. Estamos hablando del 1º del mundo y campeón del Masters de 2022, Scottie Scheffler; los clasificados en los puestos 5 y 6, Xander Schauffele y Patrick Cantlay, quienes se combinan para lograr 15 victorias en el PGA TOUR; el No. 7 Wyndham Clark, actual ganador del US Open; y el potente trío de Jordan Spieth, campeón del Masters 2015; el dos veces ganador de majors Collin Morikawa; y el dos veces ganador del PGA Championship, Justin Thomas.
Estos siete nombres buscan llevar los colores de Estados Unidos a lo más alto del Masters como lo fue hasta 1979 en donde se habían jugado 49 Masters con un solo ganador internacional (Gary Player – Sudáfrica). Pero llegó un español llamado Seve Ballesteros y trajo una nueva era al Masters y al golf.
Ballesteros ganó el primero de sus dos Masters en 1980 y durante los siguientes 21 años un jugador internacional se puso la chaqueta verde en 12 oportunidades.
¿Es una exageración sugerir que la histórica victoria de Matsuyama en 2021 podría abrir una avalancha de ganadores del Masters de Japón y Corea o de otros países como Australia (Lee), Chile (Niemann), Noruega (Hovland), Suecia (Åberg)? La historia está de su lado y una cosa que sabemos con certeza sobre el Masters es que cada año enriquece su historia.
En 2024, se hablará mucho de subtramas. La más importante será que es la décima vez que Rory McIlroy llega a Augusta, con la oportunidad de ganar el Grand Slam. (Sólo cinco lo han hecho: Gene Sarazen, Ben Hogan, Gary Player, Jack Nicklaus, Tiger Woods).
También se hablará del inmaculado golpe de bola de Scheffler y su dominio en el mundo del golf las últimas semanas.
Historias de peso todas ellas, pero también lo serán la de este contingente de nombres internacionales, especialmente la de los jóvenes de Japón, Corea y Australia. Tom Kim quedó T-16 en su debut en el Masters en 2023; Sungjae Im tiene dos top 10 en cuatro visitas a Augusta; M.W.Lee terminó T-14 en su debut en el Masters hace dos años y Si Woo Kim ha pasado el corte en seis de sus siete participaciones en el Masters.
Todos buscarán repetir el camino de Matsuyama.