España es un gran país con un escenario muy fértil para conquistar el millón de golfistas matriculados.

En 1970 tenía sólo 5.000 jugadores de golf matriculados y en el año 2010 llegó a tener 330.000; toda una cifra que por razones diversas fue decayendo hasta los 270.000 antes de la pandemia del COVID 2019.

Ese cisne negro mundial resultó ser un factor decisivo para impulsar el crecimiento del golf en todo el mundo y especialmente en España llegando en un par de años a recuperar la cifra de 310.000 jugadores con licencias de golf.

Pero España tiene alrededor de 47 millones de habitantes por tanto el índice de penetración del golf está por muy por debajo del 1% sobre su población total. Recordemos que Suecia con poco más de 10 millones de habitantes tiene más de 500.000 golfistas matriculados lo que da un registro mayor al 5% entre toda su población.

Y para dar otro ejemplo, Canadá tiene cerca de 40 millones de habitantes y un 15% de golfistas sobre esa cantidad; o sea que hay cerca de 6 millones de jugadores de golf en Canadá contra los 310.000 que hoy tiene España; con un potencial de factores muy favorable para revolucionar la cantidad de golfistas.

Veamos algunas características que le dan alta fertilidad a España para convertirse en una potencia en cantidad de golfistas:

El clima español, que no es un dato menor frente a los climas rigurosos de Suecia y Canadá, lo convierten en una geografía ideal para practicar golf durante casi todo el año; sobre todo en la Costa del Sol donde el clima suele ser benigno y soleado durante gran parte del año.

España cuenta con una historia muy importante a la hora de hablar de golf. Podemos decir que es un país donde el golf tiene cultura, raigambre y muchos adherentes. El gran Severiano Ballesteros, uno de los más espectaculares jugadores de golf de la historia mundial, colocó a su país en la cúspide del golf mundial durante muchos años. Fue “primus inter pares”. Una figura estelar del mundo del golf. Un gran influencer diríamos hoy. ¿Quién sabe cuántos seguidores tendría el gran Seve? Millones seguramente.

Esa estela de enorme jugador que significaba ser “Seve”, el ídolo de Pedreña, la siguieron el gran Chema Olazábal; el castellonense Sergio García, el malagueño Miguel Angel Jiménez y hoy día el vizcaíno Jon Rahm, entre otros que hicieron grande al golf español. Muchos de ellos fueron ganadores de la famosa Ryder Cup.   

España es uno de los países que ha maridado el golf con el turismo de manera excepcional y recibe todos los años más de un millón de extranjeros que se desviven por jugar al golf en los campos de toda España.

Esa actividad genera más de 13.000 millones de euros y 120.000 empleos directos. Un dato no menor es que los extranjeros amantes del golf han adquirido alrededor de 280.000 viviendas en España en lugares cercanos a las canchas de golf.

Un dato también muy importante es que en España hay más de 400 campos de golf esparcidos por toda su geografía; algunos de los cuales son considerados como los mejores del mundo; a saber: PGA Catalunya Golf Resort, La Finca Cortesin, Real Golf Club Valderrama, Sotogrande, El Real Golf Club de Pedreña donde naciera el gran Seve Ballesteros, entre muchos más.

España tiene una característica muy especial es que el deporte en general ha tomado un impulso estratégico muy importante desde los JJOO de Barcelona 1992 y generado políticas muy destacadas y más aún y decisivo, recrear un capital humano de dirigentes, entrenadores y otros expertos en la materia que le han permitido a ese país ganar infinidad de competencias internacionales en muchas disciplinas.

Una cuestión que dará mucho que hablar y que servirá como motor extraordinario del desarrollo del golf español es la decisión estratégica de la empresa TOP GOLF, líder en golf disruptivo, de desembarcar en la península Ibérica construyendo 8 centros entre España y Portugal, con una inversión de alrededor de 250 millones de euros.

Este es un dato central para conquistar el millón de jugadores de golf con los que España puede soñar en un mediano plazo. Esos lugares son aptos para todo tipo de públicos; no hay que tener membresía y tener palos de golf propios. Gran suerte para el golf español.

Otro dato de interés para impulsar el gran crecimiento es que en España sólo hay 80.000 mujeres con licencia de golf sobre un total de 24 millones de mujeres que hay entre la población total femenina de ese país.

El mercado de damas inconquistado es muy grande en ese país y es primordial impulsar una política de género en la materia.

El golf femenino español está de parabienes en estos tiempos porque Carlota Ciganda está entre las mejores jugadoras de golf del mundo y ello puede significar de gran ayuda como lo ha sido y lo es Lorena Ochoa en México. 

Una cuestión muy importante es que la Real Federación Española de Golf que hace un gran trabajo para desarrollar el golf competitivo, debería parar la pelota y tener una nueva mirada estratégica, más integral y holística y con el desafío presente de crecer hasta el millón de golfistas con un plan prediseñado para ello.

Creemos que hace falta un nuevo liderazgo organizacional para alcanzar ese gran desafío.

En conclusión; si hay un país que puede lograr pasar la barrera del millón de golfistas en el mediano plazo sin duda es España, pero toda la comunidad interesada en el sector tiene que re impulsar su visión de cara al futuro y enfocar este gran objetivo y diseñar un gran plan estratégico integral y holístico para lograrlo.

Como decía Walt Disney: “Si puedes soñarlo puedes hacerlo”. Arriba España.

Dedico este artículo a la memoria de mi abuelo español José María Toyos Raigoso, asturiano de pura cepa, que me educó en valores y siempre me alentó a practicar deportes.